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A TIRO DE HIT

Dominio del pitcheo y las lluvias en Lidom

Cuando la actual temporada de béisbol 2016-17 termine y se convierta en parte de la historia, recordaremos dos características de la misma: El dominio del pitcheo y la alta incidencia de suspensiones por las constantes lluvias que han caído sobre el territorio nacional en las últimas semanas.

Hoy comparto con ustedes algunos datos para poner ambos fenómenos en perspectiva. Estadísticas hasta el viernes.

Producción de carreras por juego por equipo Hasta el viernes, se anotaban 3.60 carreras por juego por equipo. Esto luego de que los Gigantes explotaran con 38 carreras en tres partidos y elevaran la producción global del circuito. De mantenerse el promedio actual, sería una de las diez estaciones de peor anotación en más de 60 torneos del béisbol dominicano.

Algunas de las temporadas de más reducida producción: En 1956-57, cuando aún no habían sido inaugurados los Estadios Cibao y Tetelo Vargas y el grueso de la actividad de la liga se celebraba en el Estadio Quisqueya, se anotaron 2.97 vueltas por juego por equipo. Otra estación de baja producción fue 1967-68 cuando el número fue 3.31. En 1957-58 los equipos pisaron el pentágono 3.48 veces por partido, en 1954 el número fue 3.50 y en 1958-59 un bajo 3.52. Un par de temporadas de los ‘70s de baja anotación: 3.52 carreras por partido por juego en 1974-75 y 3.55 en 1979-80.

Por otro lado, en la actual temporada se establecería la marca de peor anotación a partir de la expansión de 1983.

Hasta el momento, el record corresponde a 1999-00, cuando se anotaron 3.73 carreras por juego por equipo, muy similar a 1996-97 cuando el número fue 3.75.

Como dato al margen, la temporada de mayor producción ofensiva en la historia del béisbol dominicano fue 2008-09, cuando se anotaron 5.92 carreras por partido por equipo.

En esa oportunidad, tres conjuntos pisaron el pentágono en más de seis ocasiones por encuentro, encabezados por los Gigantes del Cibao, que anotaron siete por partido.

Poder de extrabase ausente El porcentaje de Slugging de la actual temporada es un anémico .312, que sería el cuarto peor en la historia. Para encontrar las temporadas menos productivas en este aspecto, nuevamente tenemos que retroceder a la década de los 50. En 1956-57, la liga tuvo un Slugging de .300 y al año siguiente de .305. En 1991-92, .310. Otras temporadas de baja producción: 1979-80 (.313), 1978-79 (.315), 1975-76 (.316) y 1996-97 (.316).

Desde sus inicios, la liga presenta un Slugging de .346. Así las cosas, en 2016-17 estamos más de 30 puntos por debajo del promedio acumulado. Es una clara señal de la escasez de bateo de poder, con cuatro equipos que aún no llegan a cifras dobles en cuadrangulares cuando se ya se ha jugado más del 60% del calendario.

El OPS es la estadística que suma el porcentaje de embasarse (OBP) y el Slugging. De ahí su nombre, “On Base Plus Slugging”. Actualmente, la liga presenta un OPS de .617.

Sería el tercero peor en la historia. Sólo en 1957-58 y 1967- 68 se han visto números inferiores en este aspecto.

Dominio de los lanzadores Hasta el viernes, la Liga Dominicana presentaba un Promedio de Carreras Limpias de 2.88. Cinco equipos estaban por debajo de 3.00, existiendo la oportunidad de que todos concluyan la temporada por debajo de esa cifra, algo que sólo ha ocurrido en 1967-68 y 1974-75.

En sólo seis temporadas, el pitcheo de la liga completa ha sido superior en cuanto a PCL: 1967-68 (2.61), 1974-75 (2.72), 1964-65 (2.72), 1956-57 (2.75), 1963-64 (2.75) y 1966-67 (2.86). Noten que nuevamente tenemos que remontarnos a una época donde nuestro pasatiempo era muy distinto.

De mantenerse las cosas como están, esta sería la primera ocasión en la era Post-Expansión con un PCL del circuito por debajo de 3.00. La mejor efectividad en esos 33 años se dio en 1999-00, cuando la liga tuvo 3.03.

Preocupa el hecho de que la mayoría de los fanáticos prefieren un béisbol con más actividad ofensiva y mayor incidencia de cuadrangulares. Es una problemática que debe recibir atención de los equipos. ¿Será un buen momento para revisar la pelota que se está utilizando?

Algo sobre las suspensiones Como es de dominio público, el clima ha sido un inesperado protagonista del actual torneo otoño-invernal. Hasta el viernes, se habían producido 20 suspensiones por lluvia. La primera reacción es pensar que se trata de una cifra sin precedentes. No exactamente. Si revisamos los últimos 20 años, nos encontramos con algunos casos comparables.

En la serie regular de la estación 2007-08, se produjo un total de 26 suspensiones. En 2003-04, las condiciones climáticas provocaron la reasignación de 21 encuentros y en 1998-99 el total fue 19. En este último caso, es importante hacer la salvedad de que se jugó un torneo más largo con cuatro equipos (60 juegos de serie regular) debido al receso de Estrellas Orientales y Toros del Este por las condiciones en que quedaron sus respectivos estadios por el paso del huracán Georges.

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