LA CRÓNICA DE LOS MARTES
Gary Sánchez, un novato con futuro
Los dominicanos tenemos un nuevo beisbolista con posibilidades de que triunfe en las Grandes Ligas. Se trata del criollo Gary Sánchez, un receptor con destellos de que podría ser una estrella.
El muchacho actuaba en las Menores con la organización de los Yankees de New York y recientemente fue subido al equipo grande y tan pronto llegó empezó a conectar jonrones, al extremo que fue colocado como cuarto bate en días pasados. En tres partidos voló la cerca en tres ocasiones.
El dominicano ha causado gran impresión con los Yankees y el dirigente Joe Girardi tiene en mente utilizarlo en todos los juegos, a sabiendas de que cuenta detrás del “home” a Brian McCann y a Austin Romine.
Después que los Bombarderos despacharon a Carlos Beltrán y Alex Rodríguez, quedaron flojos en la ofensiva, pero hay mucha esperanza en que Gary llene uno de esos huecos.
Todos los técnicos de pelota que han visto a Sánchez jugar, han emitido la opinión de que es un jugador que no puede fallar. Así lo esperamos nosotros los dominicanos. Gary, BUENA SUERTE.
Chago Rojas, historiador mocano Los mocanos tienen fama de que son valientes y lo han probado a través de nuestra historia. De esos contornos hemos disfrutado de personajes de mucha valía, sería interminable anotar nombres. MOCA es inmortal en medio del Cibao, pequeño de tamaño, pero grande por sus hombres que ha dado en todos los aspectos de la vida, escritores, músicos, artistas, políticos, literatos, deportistas, atletas, etc., etc.
El 25 de julio de 1943 nació en Guancí Abajo, Moca, a las 10 de la noche, nuestro buen amigo Santiago Rojas Grullón, alias CHAGO, columnista e historiador deportivo, hijo de Fausto Rojas Lara y Luz María Grullón.
Este periodista, con quien me ha unido amistad por muchos años, es un constante preocupado por todo lo que represente bienestar y grandeza en los deportes mocanos. Chago está al día con todos los acontecimientos de ayer y hoy, es un auténtico historiador deportivo, con una memoria que no le falla.
Chago, cuando no te vemos, siempre te recordamos.