El cargo de comisionado con rostro de cronista

Su campo de acción ha trascendido las cuatro paredes de la sala de redacción y también la cabina radial. Se trata de cuatro cronistas que por cosas de la vida, pero más aún por la política, ocupan hoy los cuatro cargos de comisionados que hay en el espectro deportivo de la República Dominicana.

Franklin Núñez ocupa el cargo de Comisionado Nacional de Boxeo desde el 2008; Ricky Noboa y Rafael Díaz fueron nombrado en el 2014 en Béisbol y Lidias de Gallo, respectivamente, mientras que Yoel Adames F. está al frente de las Artes Marciales Mixtas desde octubre del pasado año.

“Mi lectura es que la crónica deportiva del país está muy bien preparada. El material que hay en diferentes áreas del deporte y, sobre todo, en cuanto a la capacidad para desarrollar una profesión en la que conoces sus necesidades e intríngulis”, manifestó Noboa, de 62 años, un polifacético hombre del deporte --y del arte-- que ha descollado, mayormente, como narrador de béisbol.

“Qué mejor que un cronista que nace de las mismas entrañas del deporte y tiene que estar actualizado, continuamente leyendo y que tiene cierta sensibilidad para las situaciones que se dan en las diferentes áreas”, expresó el decano del grupo en términos de edad. “Creo que cada uno de los comisionados tienen una magnífica oportunidad para desempeñar sus cargos y por eso han sido elegidos”.

Feliz coincidencia Adames, por su lado, califica como una agradable coincidencia que de alguna manera demuestra que la prensa puede ir más allá de su cotidianidad, de la crítica y poner los problemas al descubierto, sino de buscar soluciones de forma práctica.

“Una muestra de ello es que nos tomaron en cuenta”, enfatiza Díaz.

Las funciones como servidor público no han impedido que ellos sigan activos en la crónica especialida en deportes, aunque en los casos de Núñez y Noboa ha disminuido.

“Al momento de ser nombrado como Comisionado de Boxeo yo estaba en nueve medios y tuve que renunciar de Teleantillas (canal 2), que era mi trabajo base, por esa razón”, apunta Núñez, un especialista del Arte de Fistiana que no desdeña otros deportes, se mantiene activo con su programa televisio semanal “Lo Mejor del Boxeo”, así como en “Impacto Deportivo”, “Momentos del Deportes”, “Finalizando la Semana” y “Voces Diarias”, donde por primera vez en su carrera aborda temas políticos.

“Un día dejaré de ser Comisionado de Boxeo, pero siempre seré periodista”, puntualiza Núñez.

En el caso de Ricky también ha disminuido las labores del cronista porque ha tenido que dedicar horas extras a sus nuevas funciones porque, según denuncia, no ha contado con el apoyo del Ministerio de Deportes.

“Eso a mí me ha quitado tiempo porque no he recibido apoyo del Ministerio de Deportes, más bien bloqueos y he tenido que buscar recursos en el sector privado y de amigos”, subraya el destacado narrador de los Gigantes del Cibao.

“Me quita un poquito de tranquilidad para yo ejercer mis funciones en la crónica deportiva”, admite Noboa, quien también forma parte del staff de “La Semana Deportiva”, programa dominical que se transmite por Sport Max. Asimismo, escribe la columna “Pensando...” en LISTIN DIARIO, la cual versa sobre temas de actualidad que pocas veces tienen que ver con actividades del músculo y la mente.

“A nosotros no nos ha afectado en nuestras laborres de comunicador. Sacamos tiempo para ambas cosas”, manifesta, a su vez, Rafael Díaz, un miembro de la Cadena Azul de los Tigres del Licey, que durante todo el año se mantiene activo desde bien temprano y hasta bien entrada la noche pasando revista al fascinando mundo deportivo, especialmente béisbol y baloncesto.

Díaz está el año entero en los programas radiales “Pizarra Deportiva”, El Sol de la Mañana e “Impacto Deportivo”, donde también deja caer sus comentarios sobre el deporte del pico y las espuelas, así como de hipismo, su otra gran pasión.

Yoel Adames, un reconocido periodista deportivo, versado en boxeo que ahora regula el nuevo cargo de Comisionado de Artes Marciales Mixtas, está empeñado en demostrar que una cosa no tiene porqué afectar a la otra, aunque, admite, siente por momentos de pone una camisa de fuerza porque lo suyo es regular, supervisar la MMA.

“He tenido una lucha por demostrar que una cosa no puede ser contraria a la otra, sino complementarse y eso es lo que he tratado de hacer. Sí me he encontrado con la disyuntiva personal de que a veces quiero hacer cosas que no debo por el cargo que tengo como son estar promocionando a nivel de los medios de las figuras de la MMA y de cosas que se piensan hacer”, argumenta. “Ha sido un reto más grande de lo que yo esperaba”.

PERFILES Ricky Noboa Casado, con cinco hijos y siete nietos, es un médico de profesión, carrera que comenzó a dejar en 1979 cuando sintió el flechazo, el gusanillo de la comunicación.

En esta faceta comenzó en Radio Radio con el programa “Estrellas del Deporte”.

Su presencia y popularidad creció en el Show del Mediodía, el toque de queda de las décadas del 80 y 90. Ahí tenía a su cargo la sección deportiva, conjuntamente, durante un tiempo, con Daniel Díaz Alejo, principalmente.

Bohemio y gourmet. Tiene tres producciones de boleros, género que cultiva.

Su aficción por el periodismo le han llevado a escribir tres libros “Reflexiones de un Comunidador 1”, “Reflexiones de un Comunicador 11” y “Transparencia”.

Tiene un cuarto en imprenta. Todos versan sobre temas sociales y políticos, básicamente.

Se trata de compendios de los artículos que publica todas las semanas en su columna “Pensando”.

Rafael Díaz Tiene 48 años y es oriundo de Jarabacoa.

Casado y con dos hijos, a simple vista parece que el béisbol es la actividad de sus amores, pero queda rezagado a un tercer lugar, escoltando a los entretenimientos de las lidias de gallos y el hipismo. Su pasión por el gallerismo le viene por herencia de sus abuelos, materno y paterno, quienes hicieron carrera por los principales coliseos gallísticos del Cibao. A los 14 años fue soltador de gallos en el Club de Bayona, hoy encatador de gallos de pelea y poseedor de la trabaja “Bórrame la Pizarra”. El primer trabajo de “Rafelito” como servidor público lo consiguió a principio de la década del 90 como repartidor de facturas de la Corporación de Acueductos y Alcantarillado de Santo Domingo (Caasd).

Luego, del 1996 al 2000, como comentarista del Hipódromo V Centenario junto con el narrador Guelo Tueni. “Débil” con la carne asada (puerco en puya) y el casabe, pero no gusta de los vegetales a pesar de todas las bondades que tienen para preservar la salud.

Franklin Núñez Nativo de la ciudad Capital, Franklin 45 años, respira boxeo las 24 horas del día, pero se mantiene al tanto de todo cuando en torno al béisbol, baloncesto y otras actividades deportivas, sin descuidar el campo olímpico.

Tiene cuatro hijos y como Rafael Díaz, Enrique Rojas, Franklin Mirabal, Pedro Briceño, Wilson Vargas, Leonardo Castillo y otros, forma parte de una generación de cronistas deportivos que crecieron y se formaron como tales en la barriada de Herrera.

En el merengue tiene a su música favorita.

A la hora de comer no tiene banderas, pero se inclina por la dominicana (arroz, habichuela y carne).

Católico, pero no suele ir a la iglesia los domingos.

De los cuatro, Franklin es el que tiene más tiempo como comisionado. Reemplazó en el 2008 al extinto Genaro Fanjul. Durante 30 años (1970-2000) la Comisión Nacional de Boxeo fue encabezada por Ramón Pina Acevedo Martínez.

Yoel Adames Con 50 años recién cumplidos y siete hijos, Yoel es el benjamín de los comisionados. Su especialidad es el boxeo, disciplina en la que no tuvo mucho éxito dentro de las cuerdas, Su experiencia dentro del amplio mundo de las artes marciales se remontan a los años 70s, influenciado por las películas de Bruce Lee y Marlon Brando. A diferencia de sus colegas comisionados, ha tenido que madrugar, tirando páginas para la izquierda, para actualizarse y poder elaborar los reglamentos que rigen las MMA.

“Ellos encontraron una casa hecha, yo he tenido que fajarme para hacerla”, subraya el sub-editor deportivo de LISTIN DIARIO y autor de la columna boxístistica Primer Round.

“Me han entregado un vaso vacío que poco a poco ha ido fluyendo y tomando contenido.”, expresa.

Yoel es amante del buen bolero, la salsa y los merengues clásicos, así como del buen comer y no baraja pleitos a la hora de poner los pies debajo de la mesa. Seducirlo con una parrillada resulta una fácil tarea y no sólo porque, como el café, ese tipo de actividad convoca al círculo familiar y a los amigos.