Los grandes lanzadores zurdos nacidos en RD

El lanzador de los Toros del Este, Raúl Valdés, tiene récord de por vida en la liga dominicana de 31 victorias y 23 derrotas. En esos números se incluye su marca de la presente temporada, en que cuenta con foja de 3-1. El total de triunfos de Valdés lo sitúa como el segundo lanzador no nacido en República Dominicana con más juegos ganados, en la historia del béisbol criollo. El líder de todos los tiempos es el estadounidense Mickey Mahler, quien registró 40 triunfos durante su carrera en el béisbol criollo. Lanzadores zurdosComo Mahler tiraba a la zurda, lo mismo que Valdés, me puse a investigar sobre cuales otros lanzadores zurdos, no oriundos de nuestro país, han sido tan exitosos como ellos dos. Indagando en los libros, me encontré con los nombres de Fred Kipp, quien actuó con los Leones del Escogido por 3 temporadas, en el período 1957-60 y Jerry Hannahs, que vistió el uniforme de los Tigres del Licey en igual número de estaciones, entre 1978 y 1981. Kipp y Hannahs registraron 22 y 20 triunfos, respectivamente y ocupan los lugares 3 y 4 en el listado de zurdos más ganadores que encabezan Mahler y Valdés. Hoy voy a escribir sobre Mahler, Kipp y Hannahs, para de esa manera rememorar sus extraordinarias actuaciones en el béisbol dominicano. Mickey MahlerMahler ha sido uno de los mejores serpentineros de la pelota dominicano en toda su historia. Lanzó por 9 temporadas en el país, desde 1977 a 1987, defendiendo en su primera campaña los colores de las Estrellas y luego pasó al Escogido, donde permaneció el resto de su carrera en la liga dominicana. En su larga estancia en la pelota criolla compiló récord de 40 triunfos y 17 reveses, en 81 partidos como abridor, de los cuales completó 19. Es el lanzador importado con mayor número de victoria en los anales de nuestro béisbol y décimo en el listado general. Sus mejores trabajos con el Escogido se produjeron, en las estación 1980-81, cuando tuvo marca de 7-2 y efectividad de 2.56 y el torneo 1985-86, en que finalizó con foja de 8-3 y promedio de carreras limpias permitidas de 1.78. Fred KippLanzador abridor, quien reforzó a los Leones del Escogido en 3 temporadas desde 1957 hastaa 1960. Su labor en la pelota dominicana se puede calificar de prodigiosa. Su récord en la liga dominicana fue de 22 victorias, incluyendo 7 blanqueadas y 9 derrotas, con una extraordinaria efectividad de 1.75. Actuó en 36 partidos, todos como iniciador, completó 16 y en 272.3 entradas, apenas le conectaron 206 hits, permitió 53 carreras limpias, ponchó a 143 y transfirió a 85 bateadores. En la historia del béisbol criollo, Kipp figura sexto en el encasillado de blanqueadas y decimosegundo en juegos completos, a pesar de haber jugado en tan solo 3 campañas. En la temporada de 1957-58, tuvo marca de 11-3 y efectividad de 1.58, liderando el circuito en victorias y porcentaje de ganados y perdidos. Este último encasillado también lo encabezó en la siguiente campaña, al terminar con récord de 7-2 y promedio de carreras limpias permitidas de 2.42. En la estación 1959-60, fue primero en efectividad, luego de finalizar con promedio de carreras limpias permitidas de 1.32 y foja de 4-4. Jerry HannahsRefuerzo de los Tigres del Licey durante 3 temporadas, a finales de los años 70 y principios de los 80. Ha sido uno de los lanzadores importados más exitosos en la historia del béisbol criollo, como lo demuestra su récord de por vida de 20-7 y efectividad de 2.43. En su primera campaña en la pelota dominicana (1979-80), ganó 6 partidos, perdió 2, con 3 juegos completos, 3 blanqueadas y efectividad de 2.83. Tiró en 89.1 entradas, permitiendo 72 hits y 28 carreras limpias, caminó a 48 y ponchó a 61. Fue co-líder en lechadas, segundo en ponches y quinto en victorias. Pero lo mejor estaba por venir, pues en la temporada siguiente, registró una de las mejores actuaciones para un pitcher extranjero en los anales de nuestro béisbol profesional. En la estación 1979-80 terminó con récord de 9-0, un juego completo y promedio de carreras limpias permitidas de 1.69. Laboró en 106.2 episodios, aceptando tan sólo 80 hits y 20 vueltas merecidas, abanicó a 54 y dio 43 transferencias. Terminó primero en porcentaje de ganados y perdidos, victorias y efectividad, además de segundo en ponches. En una tercera campaña, alcanzó foja de 5-5 y efectividad de 3.04. Trabajó en 71 innings, tolerando 55 hits y 24 carreras limpias, con un partido completo, 35 ponches y 34 bases por bolas. Esa vez terminó décimo en promedio de carreras limpias permitidas. En la próxima columna escribiré sobre grandes lanzadores derechos en el béisbol dominicano.