La otra cara de la Ciudad Colonial
Luego de un esfuerzo de más de tres años, la Ciudad Colonial está mostrando un nuevo rostro a los capitaleños y a los turistas que llegan a conocer la primera ciudad del nuevo mundo.
La Unidad Coordinadora del Programa de Fomento al Turismo Ciudad Colonial ha establecido que de 30 proyectos estratégicos formulados en junio de 2013, la mayoría se ha ejecutado, y hoy, la Ciudad Colonial exhibe otra cara: casas restauradas y pintadas, cableados eléctrico y telefónico soterrado en más del 90%, tuberías de agua potable reconstruidas, recuperación de la Fortaleza Ozama y del edificio de las Atarazanas Reales, los que estaban en avanzado estado de deterioro pese a su gran carga histórico-cultural.
Si a lo anterior se agrega que el programa de recuperación de la Ciudad Colonial se ha ocupado de formar guías turísticos, taxistas, buhoneros y otros para que den un servicio de calidez a los visitantes de la zona más vieja de la primera ciudad de América, no hay dudas de que estamos ante un programa exitoso y que merece el reconocimiento de la sociedad dominicana.
Es cierto que aun quedan importantes tareas, como la de consolidar la seguridad empleando recursos técnicos y humanos de calidad, la completa iluminación nocturna y una mayor incorporación de sus residentes a las actividades y tradiciones de la ciudad como un aporte esencial a la cultura y el deleite.
Reconocer que la recuperación de la Ciudad Colonial avanza y que hay que completar la obra para que vuelva a ser el referente del nuevo mundo no es un simple elogio a quienes lo han hecho posible, sino un estímulo para que las autoridades que confiaron en esa posibilidad y ahora ven los frutos, se proyecten hacia otros lugares emblemáticos de Santo Domingo para restaurarlos y ponerlos al servicio de los capitaleños y sus millones de visitantes.
El LISTÍN DIARIO, que nació en la Ciudad Colonial y a ella le debe una parte significativa de su historia como diario centenario, nunca apartará de su vista sus problemas, sus encantos, sus desafíos y su extraordinaria belleza y magnificencia.
Nos unimos al regocijo de quienes valoran los progresos en el plan de rescate de la Ciudad Colonial y en ella estaremos defendiendo el derecho de un sano esparcimiento.