PNUD: desigualdad frena desarrollo

La directora de la Unidad de Pobreza y Desarrollo Humano del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Melisa Bretón, mostró ayer los resultados del “Informe sobre Desarrollo Humano 2015”, donde reveló que el país ha avanzado en ese tema, pero precisó que cuando se ajusta a la desigualdad que existe en el país, se pierden seis posiciones.

“República Dominicana actualmente ocupa la posición 101 de los 188 países evaluados, lo cual lo coloca entre los que tienen un Desarrollo Humano Alto. Sin embargo, la desigualdad presente en el país, la cual es de 0.47, hace que la distribución del Desarrollo Humano sea desigual en temas que van desde los salarios entre hombres y mujeres, como las oportunidades de empleos”, explica.

No obstante a eso, Bretón aclaró que este país no es el que más baja de categoría cuando se ajusta a la desigualdad, porque Brasil, Panamá y Chile pierden en promedio más posiciones.

Explicó que el índice de desigualdad de género se lee al revés, mientras más cerca del 1 hay mayor desigualdad.

Dice que este país se encuentra por encima de Colombia, pero por debajo de Paraguay. “Está por debajo de los países de Desarrollo Humano medio, pero muy por encima de los que presentan índice alto”, dice.

Salarios Bretón indica que desde el punto de vista del informe, las desigualdades de generación de ingresos entre las personas, y las inequidades entre los géneros, son factores que actualmente retrasan el logro de un desarrollo humano inclusivo y equitativo.

“En América Latina y el Caribe las mujeres ganan un 19% menos que los hombres y suelen quedar excluidas de los cargos directivos superiores”, dice.

Aunque no mostró la diferencia de salarios entre hombres y mujeres en el país, indicó que respecto a los cargos de las cámaras legislativas del país, “solo el 19% de los cargos son ocupados por mujeres, el cual está por debajo de los países que están en la posición alta. Aunque es importante aclarar que este dato va a cambiar a partir del año que viene cuando realicen las elecciones”.

Respecto a la educación, dice que las mujeres en el país están mejores educadas que los hombres, sin embargo, cuando se compara con la integración de ambos sexos al mercado laboral, los hombres, a pesar de tener menos educación, están en mejores puestos.

Las dimensiones Bretón explica que para poder realizar el estudio sobre el Desarrollo Humano se deben tomar en cuenta tres dimensiones: salud, educación e ingreso.

En el caso de la salud, dice que en República Dominicana la esperanza de vida es de 73.5 años, “pero los países que están en desarrollo humano alto viven en promedio 75 años, por lo que estamos por debajo del promedio de los países altos como de América Latina y el Caribe”, expresa.

Respecto a la educación, explica que los años promedio de escolaridad en República Dominicana está por encima de Colombia, pero se encuentra muy por debajo de los países de Desarrollo Humano alto, que es la categoría donde se encuentra “también por debajo de la región de América Latina y el Caribe”.

En tanto, en la tercera dimensión, ingresos, RD muestra un ingreso sustantivo “el cual es menor que en Colombia, pero se encuentra muy por encima de los países de Desarrollo Humano medio y un poco por debajo de los altos”.

Recomendaciones de políticas públicas Para solucionar el problema de la desigualdad de las naciones, Bretón citó algunas de las Políticas Públicas que propone el informe, entre las cuales están: creas empleos dignos; estrategias nacionales, para atender el empleo juvenil y de las mujeres; tomar en cuenta que el mundo del trabajo es de evolución.

También garantizar el bienestar de los trabajadores, de manera particular la protección y seguridad social; abordar políticas públicas para grupos “por ejemplo en el caso de las mujeres, se hace necesario abordar el tema de trabajo remunerado y crear esquemas que permitan a las mujeres integrarse al mercado laboral a través de mecanismos para el cuido de los niños, envejecientes, en fin, opciones que permitan a las mujeres salir del trabajo no remunerado en el hogar.

“Además, se propone fortalecer las posibilidades de empleos para las personas pobres a través de microcréditos y mecanismos flexibles”, añadió.

Asimismo, eliminar las barreras de crédito a microempresas de mujeres y la introducción de tecnología móvil para disponer de información sobre el mercado de exportación y prevención de desastres; lo que haría más sostenible e informada la producción.